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Ya sea que las necesites para la oficina, para casa o para exteriores, las escaleras de madera son siempre una elección perfecta. Además de por su versatilidad, las escaleras de madera aportan un toque mucho más orgánico, son muy elegantes y, en general, son como la ropa negra: combinan muy bien con todo. De todas formas, si aún no te hemos convencido, sigue leyendo, que vamos a darte razones para elegir escaleras de madera como tu próximo proyecto.

Ventajas de elegir escaleras de madera

  • Las escaleras de madera son más ecológicas. La transformación de la madera produce mucho menos gasto de energía y recursos que el trabajo de otros materiales. Además, la madera es cien por cien reciclable, ¡así que siempre puedes darles una segunda vida después!
  • Son buenas para la salud. Está comprobado que la madera contribuye a la salud física y mental, ya que verla en interiores produce una sensación de calma y reduce los niveles de estrés.
  • Duran mucho tiempo. Unas escaleras de madera bien cuidadas pueden durarte muchos años. ¡Que tiemble Duracell, que tus escaleras también aguantan mucho!
  • ¡La estética, la estética! Como decíamos antes, las escaleras de madera quedan bien con todo, independientemente del tipo de acabado o el color de la madera. La madera contribuye a dar un toque natural allá donde esté, es agradable a la vista y transmite sensación de calidez. Además, la madera es un aislante térmico, así que crea un clima perfecto y mantiene bien el calor.
  • El tacto. Anda que no da gustito tocar madera. ¡También apto para supersticiosos!

 

Bueno, y… ¿cómo hago mis propias escaleras de madera?

Si tienes pensado sentarte a hacer tus propias escaleras, el proceso no tiene por qué ser laborioso. Si eres un manitas, quizá te apetezca hacer barandas y pasamanos con detalles muy refinados; si no, siempre puedes ceñirte a algo más simple. Lo mismo sucede con los materiales: si te gusta lo clásico, madera en madera es siempre buena compañera. Ahora bien, que nada te prive de ir un paso más allá: siempre puedes combinarlas con cristal, forja, hierro, piedra, etcétera. Eso es lo bueno de todo esto, que puedes llevarlo hasta donde tú quieras.

Normalmente, la forma de las escaleras dependerá de dónde quieras montarlas, lo que tampoco impide que puedas hacerlas como más te apetezca: escaleras de caracol, escaleras voladas, escaleras flotantes, en forma de l, de U, rectas…

Por último, es importante pensar en la resistencia y duración de las maderas que quieras utilizar. La de roble, por ejemplo, es más resistente, más dura y aguanta mejor la humedad, así que puede ser buena idea para exteriores. La de haya, por otro lado, es igual de duradera, pero encaja mejor en interiores. Otras maderas ideales para pasos en interior pueden ser la de fresno, olmo, castaño o cerezo.

En resumen…

En cualquier caso, al final los que mandan son el ojo y el sentido del gusto, así que no dudes en elegir la madera que más te convenza y mejor creas que puede combinar, ya sea para estructura o decoración: cerezo, nogal, caoba, palosanto… Cualquiera que elijas será buena decisión, ¡eso seguro!

Y eso es todo de momento. Esperamos que ahora tengáis más claro por qué es tan buena idea elegir unas escaleras de madera para próximos proyectos. ¡Creatividad ante todo!

 

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